Las tendencias en comunicación digital indican desde hace tiempo que los usuarios están hartos de tanta marca. Ya no es que no estén cómodos con recibir su comunicación, sino que escapan de ellas y toman todo tipo de medidas para mantenerlas a raya en su día a día de forma activa. La época en la que los negocios se dirigían directamente al consumidor para venderle sus productos ha llegado a su fin. El Inbound Marketing se erige como una de las estrategias más eficaces para seducir a los usuarios y convencerlos de que comprar nuestro producto o servicio realmente vale la pena.
Pero y eso del Inbound Marketing, ¿qué es exactamente?
Esta metodología se conoce en español como marketing de entrada y consiste en acompañar al usuario en todas las fases de su proceso de compra, desde el principio hasta el final. A diferencia del marketing tradicional (outbound o de salida), utiliza técnicas no invasivas para alcanzar a sus clientes potenciales a través de medios digitales.
Una de estas técnicas es el marketing de contenidos, que se basa en diseñar y ofrecer contenidos de valor a los posibles clientes. El marketing de contenidos responde siempre a una estrategia e incluye diferentes herramientas como blogs, campañas de correo electrónico, redes sociales…
Sí, las redes sociales pueden te pueden catapultar al éxito y no necesitas ser influencer para ello
Las redes sociales son mucho más que plataformas donde hablar de nuestros productos o servicios: son el escenario perfecto donde entablar una relación a largo plazo con nuestros consumidores. Y es que las redes se integran perfectamente en cada fase del proceso de compra (o ciclo del consumidor, si queremos ser más precisos), desde el momento en que se descubre una necesidad hasta la adquisición de una solución.
En ese sentido, lo más importante es conocer a quién nos dirigimos y en qué momento de su ciclo se encuentra. ¿Es uno de nuestros seguidores más fieles? ¿Acaba de conocernos por casualidad? ¿Ha adquirido nuestro producto en otras ocasiones? Dependiendo de la respuesta a cada una de estas preguntas, nuestros contenidos en redes sociales variarán en tono, estilo y formato.
Entonces… ¿a qué esperas para sacar el máximo partido de tus redes sociales?
Incorporar las redes sociales a tu estrategia de contenidos no solo significa mayor visibilidad, alcance y difusión a menor coste, también permite generar conversación con los usuarios. Y, si ejercitamos un poco la paciencia, puede traernos muchos otros beneficios.
Los contenidos que se publican en el social media se alinean con cada fase del ciclo de compra y responden a unas necesidades concretas. En primer lugar son un canal de captación, pero también la herramienta perfecta para convertir la atracción en interés y, tras cerrar una venta, interactuar con tus seguidores y nutrir esa relación con vistas en el largo plazo.